Tres Formas de Dar (2/3)

Author: Admin  //  Category: Ley de la Atracción, Superación Personal

La segunda forma de DAR es darte cosas a ti mismo. 

dandote

Sí.  Abre tu mente para recibir, dándote a ti mismo porque todo progreso comienza con una auto mejora. Es igual de posible dar en exceso a los demás como darte de menos a tí mismo.  Dar en exceso a otros y de menos a ti,  desequilibra la ley y aleja todo lo que puedas recibir.   Por eso, primero debes prestar atención a tu mejora y desarrollo para que luego puedas ayudar a otros.

Recuerda que no puedes dar a los demás a menos que primero tengas algo que dar.  Primero tienes que tener la fuerza, la sabiduría, y la substancia antes de poder compartir estas cualidades con otros.  Existen personas equivocadas que piensan que es egoísta destacar primero el mejoramiento de uno mismo.  Pero es sólo después del auto mejoramiento que eres capaz de ayudar a otros.

Al hacer justo lo contrario, cuando das en exceso a los demás y de menos a ti mismo, te sientes agotado.  Esto causa dentro de ti una sensación de carencia, que es degradante y limitante. Debido a esto, dar en exceso a los demás es contraproducente.  No logra nada constructivo.

Los psicólogos hablan de los padres que dan en exceso a sus hijos.  Esto suprime los talentos de los niños y sobrecarga demasiado a los padres. Este exceso perjudica a todos.  En la actual “edad de la permisividad’ ‘hemos sido testigos de los resultados negativos de los padres que dan en exceso.

Por el contrario, otros padres dan a regañadientes lo menos posible a sus hijos.  Esta filosofía también causa muchas dificultades, y toma años superar la pobreza de la conciencia.  Así que tratemos de lograr un balance feliz.

Los filósofos de la antigüedad aconsejaron: “cuida a tu propio ser”.   Así que date algo a tí mismo de inmediato.  Podría ser un nuevo libro que deseas leer, una prenda de vestir o joyería, o algo para tu hogar u oficina.  Podría ser salir a cenar, al teatro, a una fiesta, o tomar unas vacaciones.  Podría ser apartar tiempo diario para oración, meditación y estudio de inspiración. Podría ser algo grande o pequeño, tangible o intangible.

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