“Bill Russell fue uno de los grandes jugadores de baloncesto, el único atleta en ganar un Campeonato de la NCAA, una Medalla de Oro Olímpica, y un Campeonato Profesional, todos en el mismo año de 1956. Pero Bill Russell tenía un problema: Vomitaba antes de cada partido.” ~ Dr. John Eliot
En el libro “Overachievement”, el Dr. John Eliot cuenta la brillante historia sobre la relación entre los vomitos de Bill Russell y su juego de clase mundial. En resumen: Russell jugaba muy mal cuando no estaba tan nervioso como para vomitar antes de un partido. Él tuvo la mayor caída de su carrera en 1963 cuando casi no vomitó en la mayor parte de la temporada. Luego, al entrar en la arena para los playoffs y ver a la multitud congregada por horas antes del partido, sus nervios se hicieron presente y le hicieron sacar la cena, luego salió y tuvo el mejor juego de la temporada.
Por supuesto, no necesitamos vomitar para dar nuestro mejor juego. Sin embargo: sí necesitamos controlar las “mariposas”, aprender a manejar el estrés, disfrutar de ello y hacerlo funcionar a nuestro favor.
“He descubierto que no puedo mejorar el rendimiento de nadie sin que ellos vivan con las mariposas que vienen con empleos de mucha presión, y que también acepten este tipo de reacción física, lo disfruten y lo entiendan. ¡Ese es el primer boleto real para volverse un artista que piensa de forma excepcional.” ~ Dr. John Eliot