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En un estudio reciente, cinco mil empresarios exitosos fueron entrevistados para conocer sus rasgos, características, o atributos que tienen en común. Sin sorprender, se encontró que variaban enormemente. La gente exitosa viene en todos los tamaños, formas, antecedentes, historias, habilidades y personalidades. No hay un tipo especial de entrepreneur. El resultado fue un grupo de humanos tan variado y colorido como te puedas imaginar.

Pero los investigadores encontraron un rasgo común. Todos los individuos tenían una intensa pasión por lo que estaban haciendo.

Hay una gran diferencia entre estar comprometido con tu éxito y estar interesado en tu éxito. Si estás interesado, harás lo que sea conveniente. Si estás comprometido, harás lo que sea, y “hacer lo que sea necesario” es lo que necesitas para triunfar en los negocios, sin importar quién seas o donde estés. Ya no es posible (si alguna vez lo fue) salir adelante con un enfoque a medias.

Alguien podría pensar: “Sí, pero mantengámonos en perspectiva. No es que como que estuviéramos salvando el mundo, okey?”

En realidad, es exactamente así. La verdad es que los empresarios exitosos son manejados por la idea de cambiar el mundo alrededor de ellos. Quieren dejar su huella.

Por supuesto, parte de esa pasión es financiera. Cuando haces negocios, es natural enfocarse en el dinero. El dinero, después de todo, es el medio del negocio; es cómo mides el éxito relativo de lo que estás haciendo.

Pero aquí hay algo que muchos empresarios nunca se dan cuenta y que nadie enseña: Es difícil ser un apasionado genuino sobre el dinero, porque el dinero no tiene un carácter intrínseco.

Existen dos tipos de ingresos. Uno es el ingreso monetario y es genial tener un estilo de vida confortable y lujoso que el dinero te pueda proveer. Pero a fin de ser genuinamente feliz y verdaderamente exitoso, también necesitas un flujo saludable de ingresos psíquicos. El ingreso psíquico es el sentimiento que viene del sentido que tu contribución importa, que estás haciendo una diferencia positiva en el mundo. No hay un mejor sentimiento que saber que tu vida y tu negocio tienen propósito y significado. Este es el objetivo fundamental de una empresa exitosa.

Por ejemplo, esta es la visión de un empresa que se dedica a ayudar a emprendedores:

“Estamos cambiando el mundo al ayudar al menos a un millón de personas para que construyan el negocio de sus sueños, el cual tendrá un efecto que hará una diferencia tangible a cientos de millones de gente alrededor del mundo.”

Un propósito como ese, sí que te saca de la cama por las mañanas !

La escala y tamaño no es lo que importa aquí. Es el impacto. No importa si tu empresa es una multinacional no lucrativa que alimenta, viste y cuida a desprotegidos, o si es una imprenta que imprime publicidad o una abarrotería de tu vecindario. Se ha visto gente que es responsable de colocar el pequeño plástico que va en los extremos de las cintas de sujetar zapatos, hacer su trabajo de una forma tan apasionada, porque pueden visualizar unos zapatos seguros y bien sujetados de niños, atletas, estudiantes, bomberos, doctores, ancianos, etc. Ellos pueden ver que su cinta de sujetar zapatos tiene un impacto en el mundo.

Desde tiendas de café hasta gigantes de software, cualquier negocio puede hacer una contribución en la vida de otras personas. Su dedicación es como si buscaran la cura del cáncer. Los empresarios exitosos verdaderamente quieren cambiar el mundo.

¿Cómo vamos a resolver los problemas de nuestros países que tienen deudas externas muy altas? O ¿cómo vamos a encontrar nuevas fuentes de energía sin arruinar nuestro planeta? Sólo hay una y única manera: através del ingenio y pasión de los emprendedores.

Los emprendedores no solo quieren cambiar el mundo. ESTAN CAMBIANDO EL MUNDO. Este grupo de personas van a rehacer el futuro. No se trata de gobiernos, corporaciones y organizaciones. En este siglo XXI, se trata de hombres y mujeres apasionados en perseguir el negocio de sus sueños que tendrá un impacto positivo y transformativo en la vida de otros.

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