El Máximo Secreto en la Historia para Hacer Dinero (Parte 2/2)
Author: Admin // Category: Ley de la Atracción, Superación Personal.
Continuación del Capítulo 1 del libro “El Máximo Secreto de Hacer Dinero en la Historia”, escrito por Joe Vitale:
Hoy está muy de moda que los negocios les den dinero a las causas dignas. Los hace verse bién y por supuesto ayuda a esos que lo reciben. Las tiendas Body Shop de Anita Roddick, el helado de Ben Cohen y Jerry Greenfield, y Patagonia de Yvon Chouinard, son ejemplos vivos de cómo dar puede ser bueno para el negocio.
Pero de lo que hablo aquí es de donación individual. Te estoy hablando de que des dinero y así recibirás más dinero.
Si hay una cosa en que pienso que las personas se equivocan es que cuando practican el dar, dan poquísimo. Se agarran de su dinero y lo dejan salir goteando en lo que se refiere a dar. Y por eso es que no reciben. Tienes que dar, y dar bastante, para estar en el flujo de la vida para recibir.
Recuerdo la primera vez cuando conocí la idea de dar. Pensé que era un plan para obligarme a darles dinero a las personas que me decían que hiciera la donación. Si yo di, fue como un avaro. Naturalmente, lo que recibí a cambio correspondió a lo que di. Di poco. Recibí poco. Sino entonces un día decidí probar la teoría de dar.
Amo las historias inspiradoras. Las leo, las escucho, las comparto, y las cuento. Decidí darle las gracias a Mike Dooley de www.tut.com por los mensajes inspiradores que comparte conmigo y con otros cada día por e-mail. Decidí darle algo de dinero. En el pasado le habría dado posiblemente cinco dólares. Pero eso era cuando venía de la escasez y tenía miedo de que el principio de dar no funcionara. Esta vez era diferente. Saqué mi chequera y giré un cheque por mil dólares.
Fue el aporte individual más grande que alguna vez había hecho en mi vida en aquel entonces. Sí, eso me puso un poquito nervioso. Pero en su mayor parte me sentí emocionado. Quería hacer una diferencia. Quería gratificar a Mike. Y quería ver qué ocurriría.
Mike se quedó pasmado. Recibió mi cheque en el correo y casi se salió del camino mientras volvía a casa. No podía creerlo. Él incluso me llamó y me agradeció. Disfruté de su asombro juvenil. Eso me hizo sentir como un millonario. (¡Nota Eso!) Me gustó hacerlo tan feliz. Me deleité en darle el dinero a él. Lo que sea que él hizo con eso estaba bien para mí. Lo que obtuve fue un sentimiento increíble de ayudar a alguien a continuar haciendo algo en lo que yo creía. Fue una ráfaga interior ayudarlo. Todavía me alegro de enviarle dinero.
Y luego algo maravilloso comenzó a ocurrir. Repentinamente me llamó una persona que me quería de coautor de su libro, un trabajo que terminó pagándome muchas veces más de lo que había regalado. Y después un editor publicista en Japón me contactó, queriendo comprar los derechos de traducción para mi libro exitoso, Mercadotecnia Espiritual [Spiritual Marketing]. Ellos, también, me ofrecieron muchas veces lo que le había dado a Mike como regalo.
Un verdadero escéptico puede decir que estos acontecimientos no tienen relación. Tal vez en la mente del escéptico, no la tienen. En la mía, sí la tienen.
Cuando le di dinero a Mike, envié un mensaje a mí mismo y al mundo de que estaba afluente y en el flujo. También configuré un principio magnético que atrajo el dinero hacia mí: Como das, así es que recibirás.
Da tiempo y recibirás tiempo.
Da productos y recibirás productos.
Da amor y recibirás amor.
Da dinero y recibirás dinero.
Este es un consejo que de por sí puede transformar tus finanzas. Piensa en la persona o personas que te han inspirado durante la última semana. ¿Quién te hizo sentir bien de ti mismo, tu vida, tus sueños, o tus metas? Dale a esa persona algo de dinero. Dales algo de tu corazón. No seas tacaño. Sé de abundancia, no de escasez. Da sin esperar a cambio de esa persona, pero espera a cambio. A medida que lo haces, verás de qué manera tu prosperidad aumenta.
¡Ese es el Máximo Secreto de Hacer Dinero en la Historia!
“Si lo ves, tócalo.
Si lo tocas, siéntelo.
Si lo sientes, ámalo.
Si lo amas…Dalo”.
Porque NADA habla más fuerte para el UNIVERSO, de tu CREENCIA en el Yo, la abundancia, y el amor, que dar. Y cuando el Universo escucha, más te será dado. NO COMO UNA RECOMPENSA, sino que porque verdaderamente creíste… en el Yo, en la abundancia, y en el amor. ––De www.tut.com