“El 21 de diciembre dediquen un momento para dar gracias a la vida, al Sol, a la Luna. Interactúen con el Sol y la Tierra, mediten, es una fecha espiritual para pedir perdón. El 22 esperen la salida del sol… será ahí cuando los mayas hablemos.” ~ Rigoberta Menchú Tum
La ganadora del Premio Nobel de la Paz hizo un llamado a la sociedad para dejar a un lado la idea sobre el fin del mundo.
La Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú, quien arribó el domingo pasado a Yucatán, México, lamentó *el mal uso* del calendario maya con la difusión de un supuesto fin del mundo, y llamó a revalorar el mensaje de paz y renovación que en realidad heredó dicha civilización.
“Es un buen momento para la reflexionar y pedir perdón por todo el daño a la humanidad”, dijo durante la conferencia La Cultura Maya en el siglo XXI, dentro del Festival de la Cultura Maya 2012.
La promotora de los derechos indígenas se pronunció contra la errónea interpretación que se ha dado al calendario maya y que ha sido motivo de *burla en diferentes países*, sobre todo Estados Unidos.
“Es una falsedad que se acaba la humanidad, porque eso es algo de mucho tiempo atrás. Debemos aprovechar para pedir perdón de todo lo malo que hemos hecho a lo largo de nuestra existencia”, dijo.
Según Menchú existe “una total ignorancia del manejo del calendario maya”, y “el sensacionalismo nos ganó. El 22 de diciembre, los mayas hablaremos de lo que significa el sagrado calendario maya”.
Exhortó a la sociedad a realizar un “rito espiritual dejando atrás la religión para enfocarse en un encuentro propio. Hay incertidumbre en la humanidad. Es una burla lo que se ha hecho desde Hollywood sobre el calendario maya.”
“El 21 de diciembre dediquen un momento para dar gracias a la vida, al sol, a la luna. Interactúen con el sol y la tierra, mediten, es una fecha espiritual para pedir perdón. El 22 esperen la salida del sol. será ahí cuando los mayas hablemos”, indicó ante estudiantes, catedráticos y funcionarios de gobierno reunidos en las instalaciones del Gran Museo del Mundo Maya.